Los delantales desechables de Grupo OHP están diseñados para proteger la zona frontal del cuerpo en entornos donde la higiene y la seguridad son prioritarias. Son productos de un solo uso pensados para hospitales, clínicas, laboratorios, industria alimentaria, empresas de limpieza y otros negocios que necesitan una barrera eficaz frente a salpicaduras y suciedad.

Para completar la protección del personal, estos delantales desechables pueden combinarse con nuestras mascarillas desechables y cubrezapatos desechables, creando conjuntos de higiene adaptados a los protocolos de cada centro.

Tipos de delantales desechables profesionales

En esta categoría puedes encontrar distintos tipos de delantales desechables según el tipo de trabajo:

  • Delantales de polietileno (plástico) con peto: Pensados para tareas con más riesgo de salpicaduras; suelen ser la opción típica en alimentación y limpieza. En OHP tienes modelos con medidas como 120×76 cm y especificación de grosor/galga.
  • Delantales de PP/tejido no tejido y plastificados: Opción orientada a mantener ligereza y aportar barrera adicional según el modelo.

Características principales de los delantales desechables profesionales

Los delantales desechables profesionales están diseñados para ofrecer una protección frontal eficaz sin limitar la movilidad del usuario. Suelen fabricarse en materiales plásticos o tejidos no tejidos ligeros, impermeables y resistentes a las salpicaduras, lo que los hace especialmente útiles en entornos sanitarios, industria alimentaria, laboratorios y empresas de limpieza.

La mayoría de modelos cuentan con diseño con peto y tiras de sujeción que permiten ajustarlos rápidamente sobre la ropa de trabajo, así como con medidas que cubren desde el torso hasta por debajo de la cintura o las rodillas, según el nivel de protección requerido. Al tratarse de productos de un solo uso, están pensados para colocarse, realizar la tarea y desecharse a continuación, manteniendo unos elevados estándares de higiene en el día a día del centro.

Además, los delantales desechables se suministran en cajas con múltiples unidades, lo que facilita su distribución por turnos, servicios o áreas de trabajo. Esto permite a hospitales, clínicas, industrias y empresas mantener siempre disponibilidad de protección sin tener que depender de procesos de lavado o planchado.

Errores frecuentes al usar delantales desechables y cómo evitarlos

Uno de los errores más habituales es reutilizar el delantal desechable para varios turnos o tareas, lo que aumenta el riesgo de contaminación y anula la principal ventaja del producto: ser de un solo uso. Para evitarlo, es importante recordar que el delantal debe desecharse siempre tras finalizar la actividad o cuando se vea claramente manchado o deteriorado.

Otro fallo común es no cubrir correctamente la zona frontal o colocarlo de manera apresurada, dejando partes de la ropa expuestas. Es recomendable ajustar bien las tiras de sujeción y comprobar que el delantal cubre las áreas críticas según el tipo de trabajo (torso, abdomen, parte superior de las piernas, etc.), especialmente en entornos sanitarios y alimentarios.

También es frecuente no seguir un orden adecuado al retirar el EPI, tocando con las manos zonas potencialmente contaminadas. Para minimizar este riesgo, conviene quitar primero el delantal desechable sujetándolo por las tiras, enrollándose hacia el interior y depositándolo en el contenedor correspondiente, para después retirar el resto de equipos de protección siguiendo el protocolo del centro.

Preguntas frecuentes sobre delantales desechables

¿Es recomendable combinar los delantales con otros EPI desechables?

Sí, lo habitual es usarlos junto con batas, guantes, gorros, cubrezapatos y mascarillas, para lograr una protección más completa en entornos de riesgo.

¿Los delantales desechables se pueden reutilizar?

No, están diseñados para un solo uso. Tras finalizar la tarea o el turno deben tirarse en el contenedor indicado por el protocolo de tu centro.

¿Qué materiales se utilizan en los delantales desechables?

Principalmente materiales plásticos e higiénicos y tejidos no tejidos que ofrecen una buena barrera frente a salpicaduras y suciedad, pensados para uso profesional.

¿Qué se hace con el delantal después de usarlo?

Retíralo sujetando por las tiras, enrollándolo hacia dentro para no tocar la parte exterior y deséchalo en el contenedor indicado por el protocolo del centro.

¿Cuándo debo cambiar el delantal desechable?

Cámbialo al terminar la tarea o antes si está manchado, mojado o deteriorado, y siempre al pasar de una zona “sucia” a “limpia” si el protocolo lo exige.